El camino verdadero1

Prócoro Hernández Oropeza
Cuando alguien inicia su camino espiritual, lo encuentra y sabe que ese es su verdadero camino. Pero aún al más avezado viajero espiritual le surgen dudas, se le presentan otros caminos, otros maestros y entonces se confunde. Cierta ocasión en que Guru Nanak, antiguo sabio de la India se asentó bajo un árbol, en las afueras de un pueblo denominado Pakpattan, el Guru se puso a cantar:
Tú mismo eres el cuaderno
Tú el lápiz y tú la lapicera
Tú también la palabra escrita
Tú eres el único. No hay otro.

El alumno de un sufí que recogía leña escuchó el cantó y le impresionó, sobre todo porque le acompañaban un musulmán y un hindú. Le contó a su maestro y este le pidió a su alumno que le fuera a hacer la siguiente pregunta:
-Hay un Dios pero hay dos caminos. ¿Cuál debemos aceptar y cuál rechazar?
Cuando el discípulo realizó la pregunta al sabio, este sonrió y le contestó:
-Hay un solo Dios y sólo hay un camino, adhiérete a uno y rechaza al otro.
El jeque Behram se impresionó y fue a ver al gurú, le saludó con: Assalam Alaikun –que la paz sea contigo. El Guru respondió: “Saludo al único e indescriptible dentro de ti”.
El jeque quedó aún más sorprendido y le dijo: “Tu respuesta es misteriosa, los hindúes niegan al Dios del islam y los musulmanes acusan a los hindúes de adorar a muchos dioses. Aún sí tú dices que hay un solo Dios y un solo camino.”
-“No hay misterio alguno”, respondió Nanak. “El ignorante impone su propia oscuridad sobre la luz de la verdad. Los que ven divisiones no conocen a Dios. Aquellos que lo conocen proclaman su unidad.”
Dios es uno
No está sujeto a cambio alguno
Su luz es la vida de la creación
No puede ser objeto de adoración
Adoren al Dios único,
Que reina en el agua y la tierra.
Lo que el sabio pregonaba era que Dios está dentro de cada persona, en todo lo que nos rodea, en los árboles, las montañas, ríos, mares, en el viento, en las nubes, en todo lo que captamos por los cinco sentidos y más aún por los sentidos sensibles o del Ser. A pesar de que han venido muchos avatares y se han creado religiones con sus enseñanzas, en realidad sólo existe un único creador y todos esos avatares han sido sus mensajeros. Al creador poco le importan los aspectos, cómo nos vestimos, con que apariencias nos presentamos, sólo una vida pura, avivada con la verdadera devoción gana su aprobación. Y Nanak le dice al jeque si me preguntaran como me vestiría para encontrarme con el Señor, mi respuesta sería con la dulzura del habla y el cultivo de la virtud; la humildad en la acción, el perdón en la conducta y las palabras que son como bálsamo, son los verdaderos adornos del alma.
Sabios como Nanak han venido a entregarnos lecciones de vida, verdaderas enseñanzas, pero el velo de la ignorancia no nos deja percibirlas o simplemente las ignoramos por que estamos embriagados por el mundo material, los deseos de poder, riqueza y fama. En síntesis, sólo hay un camino, aquel que tiene corazón y nos guía hacia la luz, hacia la verdad eterna. Y sólo quien posee un corazón verdadero es aquel en donde sólo habita el amor de Dios. Estás enseñanzas las pregonó Nanak cerca del 1500 D.C. Y antes de él Jesús, cercano a él Buda, y atrás Krishna, Rama y muchos otros sabios.
1. Vida y enseñanzas de Guru Nanak, una guía espiritual para la era de Acuario, Editorial Diana, México, 2004