Om tat sat, Yo soy eso
Prócoro Hernández Oropeza De pequeños, cuando surgía alguna diferencia entre dos amigos o hermanos solíamos decir: Pinto mi raya. Esto para delimitar mi espacio, para no ser molestado o para marcar mis diferencias con el otro. Era y sigue siendo una cuestión de costumbre o de hábitos; lo es porque desde que nacimos en este planeta con la conciencia dormida venimos con esa aparente verdad de que estamos divididos, cada uno está separado del otro. Entonces surgieron los apegos, las posesiones, la propiedad privada, las leyes y la separación de razas, países, culturas. Y cada persona, raza o nación piensa que es mejor que la otra y se inculca la idea de que cada especie, cada individuo debe, si quiere sobrevivir o destacar, luchar denodadamente contra el otro; vino la competencia, la división, la lucha, la guerra, el exterminio. En los antiguos textos sagrados védicos, cuando se vivía en una sociedad de luz, con conciencia despierta, se menciona la palabra Om tat sat, como un mantra s