Adquiriendo una mente pura
Prócoro Hernández Oropeza Cómo adquirir una mente libre de aspectos negativos, densos, perturbadores y tóxicos, esa es una pregunta que todos debemos hacernos. Dicen los maestros que del mismo modo que saturas el agua con sal o azúcar, tendrás que saturar la mente con los pensamientos de Dios, con divina gloria, con presencia divina y con sublimes pensamientos espirituales que despierten el alma. Sólo de esta forma podremos establecernos en la conciencia divina. Para llegar a ello debemos mantener sometidos los sentidos, dominando sus deseo, respirando quietamente por la nariz y dejar que el sabio observe la mente como el cochero observa la carroza conducida por los caballos. Para ello requiere el fuego de la concentración, la auto observación de todos sus procesos, entonces para el cuerpo, compuesto de tierra, agua, aire, fuego, éter, no habrá enfermedad ni muerte, ni dolor; sólo entonces, sostiene Sivananda, se ha obtenido un cuerpo ardiente con el fuego de la concentración.