Justicia y gracia
Prócoro Hernández Oropeza Los historiadores, personas que se escabullen en los vericuetos del pasado, le achacan a Benito Juárez esta frase que parece quedó muy marcada en la frente de, cuando menos los políticos mexicanos, y dice: “A los amigos justicia y gracia, a los enemigos la ley a secas”, de tal suerte que nuestra amada justicia está presa por los egos de los malos políticos, la corrupción y la vanidad. Esto genera mucha insensibilidad cuando de aplicar e interpretar la ley se trata. En las cárceles existen, quizá miles de personas que por un delito menor y por no tener recursos, ni palancas para defenderse, quedan ahí por meses o hasta años. Personas que por necesidad roban pan o algún alimento para él o para su familia. De estos casos existen historias gloriosas que vale la pena mencionar para dar fe de que no todos los humanos tienen el corazón duro. Primer acto: Un niño observa a través de los cristales platillos que ofrece un pequeño restaurante chino, entra con preca