Entradas

Mostrando entradas de agosto 30, 2015

La ley del amor, ahimsa

Imagen
Prócoro Hernández Oropeza Parte I En la historia de la humanidad la violencia ha sido uno de los actos sobre lo cual se ha cimentado su desarrollo. Todos los pueblos y civilizaciones han recurrido a la violencia sea para desarrollarse, extenderse, perpetuarse o simplemente para sobrevivir. Esto no significa que la violencia, en sus distintos gradientes sea un instrumento o un mal necesario. Lo ha sido porque el hombre ha caído en un sueño profundo y se ha olvidado de su verdadero origen. El amor, que es una de las leyes primordiales que debiera ser acatada por todos los gentiles, se ha perdido o ha sido subyugada por los rencores, las bajas pasiones y los instintos animales que predominan en la psique del hombre. La guerra es uno de sus expresiones más mortíferas y deleznables que ha sembrado muerte, horror y miedo. En el fondo de cada acto de guerra está la lucha por el predominio, el poder, la riqueza, el orgullo de raza, el miedo, la venganza. Muchas de esas guerras han tomado

Psicogénesis y lepra psicológica

Imagen
Prócoro Hernández Oropeza Nuestra alma está contaminada por la lepra de carácter psicológico. Es una lepra que se carcome nuestra esencia, nuestra consciencia y la tiene fragmentada, desarticulada, prisionera. En los tiempos antiguos la enfermedad de la lepra era infecciosa aunque no muy contagiosa y era considerada incurable, mutilante y vergonzosa. En esta caso la lepra psicológica pareciera ser incurable y aunque es mutilante y vergonzosa, el hombre ordinario no se da cuenta de ello. De tal modo que puede convivir con esa enfermedad psicológica aceptando que es bilioso, iracundo, envidioso, engreído, vanidoso, fornicario, mentiroso, codicioso, miedoso, testarudo y muchos epítetos más. Son los miles de agregados psicológicos que se han adherido a su alma y la han fragmentado. Ellos han tomado posesión de su mente, pensamientos, sentimientos, emociones y su voluntad. Cuando menos durante la Edad Media, los que padecían esta enfermedad llevaban unas pequeñas tablas en la mano, llam