Los dichos de Tomas, evangelios gnósticos

Prócoro Hernández Oropeza
Segunda y última entrega*
He aquí las palabras secretas que Jesús el viviente ha dicho y que ha escrito Didímo Judas Tomás.
En el primer logion o dicho, recopilado por Tomás dice: “Logion 1. Y Él ha dicho: aquel que encuentre la interpretación de estas palabras, no conocerá la muerte.” Como se dijo en la entrega anterior, y como lo afirma en la primera línea el mismo Tomás, estos dichos forman parte de una enseñanza secreta, iniciática y dirigida a alumnos que están listos para escucharlas y comprenderlas. Cuando afirma que quien encuentre la interpretación de estas palabras no conocerá la muerte, no significa que no desencarne, sencillamente Jesús hace alusión a aquellos que reconocen que son un espíritu y han venido a vivir experiencias humanas para recordar el camino a casa. Cuando lo descubren saben que son eternos, lo único que muere es la carne.
Entre los dichos que Jesús dice a sus discípulos, varios tratan de dar respuestas acerca del cielo o del reino de Dios o del lugar de donde viene el maestro. Uno de ellos es el logion 20.
Los discípulos dijeron a Jesús: Dinos a qué se parece el Reino de los cielos. Él les dijo: Es semejante a un grano de mostaza, la más pequeña de todas las semillas, pero cuando cae sobre la tierra cultivada, produce una gran rama y se convierte en refugio para los pájaros del cielo. Esto es, cualquier espacio donde el reino de Dios se manifieste se convertirá en el Edén soñado, el paraíso y ese paraíso se puede construir en esta tierra. Y cada uno que se lo proponga puede hacer de su espacio un edén, sólo pensando, viviendo y actuando como si ya estuviera ahí. Vivir como un iluminado, pensar y actuar de esa manera.
En Logion 22. Los discípulos le preguntan que si se hacen pequeños ¿podrán entrar en el reino? Jesús dijo: Cuando hagáis de dos uno, y cuando hagáis lo que está adentro como lo que está fuera y lo que está fuera como lo que está dentro, y lo que está arriba como lo que está abajo, y cuando hagáis, el macho con la hembra, una sola cosa, de modo que el macho no sea macho, ni la hembra sea hembra, cuando hagáis ojos en lugar de un ojo y una mano en lugar de una mano y un pie en lugar de un pie, una imagen en lugar de una imagen, entonces entraréis en el Reino. En este dicho, se nos dice que cuando nuestro Ser finito (personalidad) se una con el Ser infinito, no habrá más dualidad, no más separación. Soy uno con Dios, Dios y yo somos uno, sólo entonces podremos entrar en el reino.
En el Logion 24: Sus discípulos dijeron, haznos conocer el lugar donde tú estás, porque es una necesidad para nosotros que lo busquemos. Él les dijo: ¡El que tenga oídos que oiga! Hay luz en el interior de un hombre de luz, y él ilumina al mundo entero. Si no lo ilumina, son las tinieblas. Porqué buscar afuera, si la luz está adentro. En nuestro interior está la verdad, la sabiduría, el amor, la unidad. Cuando se ilumine, iluminará al mundo, como Buda o Jesús. En caso contrario será un ente de las tinieblas.
En Logion 50. Jesús dice: Si os dicen ¿De dónde habéis nacido?, decidles: Hemos nacido de la luz, allí donde la luz ha nacido de sí misma, ella (se ha levantado) y se ha revelado a su imagen. Si os preguntan ¿Quiénes sois?, decidles: Somos sus hijos y somos los elegidos del Padre que está vivo. Si os preguntan: ¿Cuál es el signo de vuestro padre que está en vosotros?, decidles: Es un movimiento y un reposo. A este respecto, lo que Jesús nos recuerda es que venimos de la luz, pero hemos caído en las tinieblas del ego. Pero en realidad somos hijos del Dios vivo, somos los elegidos, siempre y cuando reconozcamos que somos una esencia divina y pertenecemos a Dios.
En realidad, estos dichos hablan a la esencia y los mensajes son para aquellos que puedan descifrarlos a la luz de la verdad, de la verdad de su Dios interior.
*Basado en el libro: Los Evangelios Apócrifos, (Para esclarecer el Nuevo Testamento), textos escogidos y presentados por Pierre Crepón, Editorial EDAF, Madrid, España.

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